La carriola que te da más estatus que una AMEX Centurión (y sin arruinarte)
Ya sé lo que estás pensando… no hay nada más prestigioso—socialmente hablando entre mortales—que una American Express Centurión (a.k.a. Amex Black). Sin embargo, en nuestros últimos viajes familiares, me he dado cuenta que hay un artículo que, a mi parecer, te da el mismo estatus que esa tarjeta premium, y que puedes usar y pedir sin arruinarte.
No es un reloj, ni un auto, ni un outfit ganador. Señores, este artículo es nada más y nada menos que (drumroll please)….. la carriola Mima.
Así es, ¿quién iba a pensar que una carriola podría darte el prestigio al nivel de una tarjeta tan mítica? Si no la conoces, déjame decirte que no es cualquier carriola. Es la Bentley de las carriolas. Tiene un diseño impecable, colores elegantes y, al mismo tiempo, es una carriola todoterreno. Es mi opción para el day to day y, hasta ahora, nunca me ha fallado.
Sin exagerar, la Mima me ha abierto muchísimas puertas, me ha permitido entrar a restaurantes sin RSVP y me han dejado adelantar filas en Disney solo por verme con ella (además de traer conmigo una bebé que parece muñeca).
¿Por qué la compré habiendo tantas opciones más económicas en el mercado?
Simple: Porque si eres un papá viajero, una carriola premium es clave para moverte sin complicaciones.
Una buena carriola como la Mima hace toda la diferencia y te ahorra muchos dolores de cabeza. Además, no creas que es una opción inalcanzable, hay modelos desde los $1,000 USD.
Si te soy franco, no existe una carriola que sea siempre práctica o cómoda para ti; todas tienen sus detallitos, y la Mima no es la excepción. Andar con ella en el aeropuerto o en Uber, por ejemplo, es un show ya que son dos piezas grandes desarmables de un tamaño considerable.
Gracias a su color (no 100% negro), no absorbe tanto calor. Además, tiene colchones súper suaves, espacio suficiente para que estire las piernitas y un nivelador de asiento que le permite dormirse en una posición cómoda.
Al final del día, lo más importante es su seguridad y comodidad, pero si a ello le puedes agregar estos beneficios que te comento, me parece totalmente un win-win.
Cuál ha sido tu accesorio de papá más útil o inesperadamente poderoso? Cuéntame en los comentarios, ¡quiero leerte!